La capa negra

Estoy harta de pensar que la gente es distinta a como te la imaginas.

Cansada de callar a mi voz interior, que te dice como son las cosas en realidad.

Siento que ilusionarse es perder el tiempo. Un tiempo que no se recupera.

Siento como envejece mi piel y aun así sigo creyendo en cuentos de niños.

Siento que cuando voy a dar el paso de hablar es como si viniera una bocanada de aire que hace que cierre la boca.

Que no quiero seguir caminando para no cruzarme más piedras en el camino que sigo.

Siento que por cada paso que doy hacia delante retrocedo cuatro hacia atrás.

Que a veces solo miro el reloj para ver como avanzan las horas.

Ya cuesta mucho confiar.

Cuesta levantarse de tantas caídas. 

No es que me sienta engañada o estafada, si no decepcionada. Y no por los demás si no por mi misma, porque quería creer que por una vez mi sexto sentido me fallaba... cansa ya el no ir de frente, las verdades a medias, el vaso medio vacío, la tinta del bolígrafo a medio escribir. Porque las rocas parece que se están convirtiendo en montañas. Y una montaña es un canto.  Lobos disfrazados de tiernos corderitos, arrasan todo a su paso. Y caperucita ya no quiero llevar su capa roja, ahora prefiere llevarla negra. 

Estoy cansada de encontrarme rocas en el camino. De que me quieran hacer creer que los cuentos, existen en realidad. Siento que tengo tantas heridas en el alma que no cicatrizan. Cansada de fingir que las cosas no me duelen. De mostrar sonrisas falsas, cuando solo tengo ganas de llorar. Quiero caminar por un camino sin tantas piedras, sin mentiras. Quiero reír sin fingir. 

Sinceramente quiero gustar por como soy y no por como me veo. 

¿Porque costara tanto decir la verdad?

Como me encantaría que mi mente se evadiera de las voces de la multitud, ni escucharme tampoco a mí.

Por más que grite no me oigo.

Por más que abro los ojos, se me vuelven a cerrar.

A veces no sé porque mi vida parece un capítulo a medio terminar. Un párrafo que no terminas de leer y te anclas en él.

Lo bueno es que al final de este capítulo, me doy más valor para escribir el siguiente.